Chatitas

Adrian Gonzalez Molina
(5)
Dulces típicos madrileños riquísimos!! Las chatitas son una especie de bombones o alfajores, compuesto de un bizchoco mojadito, relleno de dulce de leche, frambuesa o fresa, con una cobertura de chocolate blanco, con leche o negro. La verdad es que valió la pena ir hasta la panaderia para comprarlas. Me prepararon la caja en el momento de pedirlas. Si es verano o hace mucho calor guardarlo en la nevera antes de tomarlo para que el chocolate no se derrita. La caja fue con doce chatitas, 4 de cada sabor por un precio de 12€. Creo que puedes hacer la capaz de todo un sabor, pero no estoy seguro. Si vais a Madrid deberíais pasar a comprar una caja. Me aguanto un viaje en el coche de 5 horas en Junio sin problemas, un poco blandas en llegar pero sin problemas.

Paloma Ariza
(5)
Es una de las pastelerías/panadería que tengo debajo del trabajo y cada vez que tengo ocasión de ir no me lo pienso. Riquísimo el desayuno con muchos tipos de pan, también tienen comida casera que suelen tener siempre lo mismo pero van cambiando algunos platos y están muy buenos. Pero lo mejor para mi gusto es el trato de ellos, tanto los chicos de la mañana como las chicas de la tarde son un encanto, siempre pendiente de atender, de ayudarte a elegir entre tantas cosas que tienen. Geniales!!!

Mileiby Gonzalez
(5)
Iba caminando y conociendo un poco el lugar y al ver la pastelería no pude resistirme a entrar y probar los dulces que desde la vitrina te invitaban a ser probados. Así que entre y no me equivoqué, me encantaron los dulces en especial el soufle de limón y mi café para acompañar ni hablar! Repetiré porque además el trato del personal es de primera.

Verónica Pérez González
(5)
No solamente es una magnífica pastelería (roscones, torrijas de roscon y muchas más cosas), también tenéis panadería, con una gran variedad de panes. Hacen desayunos, tienen menú del día y platos para llevar, que hacen en la mañana y esta suuuuuuper bueno. También podéis encargar tartas y tienen catering.

Rubén Vico Blázquez
(5)
Pastelería de las de toda la vida. Dulces artesanos de una calidad altísima y personal súper agradable. Se nota que llevan la tira de años en el barrio y que saben tratar a la gente. También tienen comida casera precocinada, que no he probado, pero tiene una pinta buenísima también.