Bernina 1930, S.L.

Olivia Marín
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Hemos ido hoy a desayunar por primera vez y a pesar de tener bastante explorada la zona, nos ha sorprendido. En primer lugar el ambiente del interior del local es de 10, la música relajante, el aire acondicionado, simplemente espléndido. Los precios son algo caros pero asequibles, lo normal para una cafetería en pleno centro. Además de los típicos desayunos de café y tostada (de los que soy muy fan) tienen bollería, helados, batidos, pasteles, bocadillos, ensaladas y bebidas alcohólicas (una lastima que sea tan temprano, sino me habría pedido una). Por último destacar que es enternecedor ver a camareros jóvenes aprendiendo el oficio con tantas ganas de esforzarse. Hace que una tenga esperanzas en la economía del país.